Esperanza. Las rebeliones se basan en la esperanza. Y es la esperanza de ver algo bueno la que ha mantenido al seguidor durante un largo y duro año hasta llegar al estreno.

Las luces se apagaron. El logo apareció en la oscuridad y la esperanza ya no hizo falta. Apareció la magia.

Hemos sido testigos de una estrella fugaz, algo que muchos consideraban imposible. Hemos visto a Disney arriesgando y mostrando al mundo que son unos magos en el mundo de la ilusión y la emoción.

Rogue One es Star Wars y algo más. Se siente, se respira, se oye y se ve como Star Wars, pero van más allá. Amplían horizontes mostrando algo único en esta saga, alejándose de sus hermanas mayores para ser algo que brille con luz propia.

Vemos como la rebelión descubre la existencia de La Estrella de la Muerte y como van a robar los datos, y mucho más.

En esta reseña estoy dividido entre mantener los detalles al mínimo y destriparlos. Va a ganar lo primero, pero esta entrada saldrá mucho más tarde de lo previsto para no estropear la experiencia a algún incauto.

Se nota desde el primer momento que Disney y LucasFilm no consideran esto parte de la saga principal, debe desmarcarse de ella ¿Qué mejor forma de dejarlo claro que omitiendo la famosa introducción y el tema principal? La película empieza de golpe, solo vemos el logo de LucasFilm y arranca, y cuándo el prólogo pasa y vemos el título no esta encabezado por el tema más famoso de la historia. Giacchino trastoca la composición y la personaliza para la película, le hace su propio tema exclusivo.

Acordes aquí y allá evocan a Williams y las demás películas dónde y cuándo deben. Vader, la rebelión, los puntos más representativos tienen su tema ya asociado, pero el resto tiene su propia personalidad. Ya he oído, o leído mejor dicho, a gente que considera esta banda sonora menor cuándo la realidad es que es distinta. Giacchino es un genio, sabe transmitir lo que quiere. Incluso aunque nos parezca que entra en conflicto con la cinta, como al final que se escucha un tema esperanzador mientras aparece la Estrella de la Muerte en el horizonte.

No es una mala elección, es un mensaje. Rogue One va a morir, todos lo sabíamos, pero son la luz de la esperanza, han logrado su objetivo y les ha costado la vida pero gracias a ellos se ha iniciado la verdadera rebelión. Por eso suena un tema esperanzador, no porque vayan a salvarse es porque esto no es más que la primera batalla de muchas, y la han ganado pese a morir.

Debería ir con un orden más estricto, y no hablar del final ahora pero me siento artificial haciéndolo.

Hilando con artificial, hemos dado un nuevo paso en el rejuvenecimiento mediante técnicas digitales. Han resucitado al gran Peter Cushing, directamente, eso no es un muñeco digital, han ido a su tumba le han retirado las telarañas y lo han devuelto a la vida. Gesticulación, forma de andar, de moverse, como pone las manos, los rictus, incluso como se queda de pie, es Tarkin. Por no hablar de lo increíble que es a nivel de detalles, podía ver incluso las venas azules translucidas a través de la piel, oscureciendo parte del rostro como en la original.

En Tron Legacy me quede maravillado ante el efecto, pero solo eso, veía un efecto increíble. Aquí no, aquí se me ha caído la mandíbula al suelo al ver a uno de mis héroes volviendo a actuar.

No es el único que regresa de esta forma, aunque si el único fallecido (Para mi desgracia), también tenemos un breve y necesario cameo de Leia Organa, si con Tarkin me quede de piedra con Leia se me saltaron los ojos, no es más que un vistazo pero es idéntica, como si hubieran cortado fragmentos de Una Nueva Esperanza y los hubieran pegado.

Y para terminar con el trío de legendarios que reaparecen vamos a mencionar al gran Darth Vader y sus dos breves y perfectas escenas. La primera que sigue mostrando capas de Vader ya vistas en el universo expandido, como su odio a la armadura que le mantiene vivo al enseñarnos como se sumerge en tanques de bacta para curarse (O tal vez lo interpreto al saber lo poco que le gusta el traje) o la presencia de acólitos a su servicio.

¿Puede ser Snooke uno de estos acólitos o los caballeros de Ren una evolución de ellos y que el planeta en el que vemos a Vader no sea Mustafar (Como pudiéramos suponer) sino Ren? Muchas preguntas deja esa breve escena, y dudo que queden sin respuesta.

Y luego esta LA ESCENA. La escena que provoca esta reacción: Solo por este minuto merece la pena pagar la entrada.

Oscuridad. Humo. Una respiración. Un sable encendiéndose. Rojo. Vader contra una docena de rebeldes.

Toda la escena es pura majestuosidad. Nos hemos pasado dos horas viviendo con los rebeldes, luchando por ellos. Llega esa escena y como si los pasan a cuchillo a todos, vamos con Vader. Es el perro del Emperador, implacable, irreductible. Crea una matanza y aplaudimos buscando más, ese es el poder de esa escena y de lo bien tratado que esta el personaje. Lo han mimado.

Y ya que hablamos de Vader, ¿Por qué no comento uno de los puntos en los que Disney se ha atrevido a arriesgar? Hacer que los rebeldes no sean una fuerza inmaculada del bien, haciéndoles cometer crueldades, traiciones y asesinatos a traición por el bien de la Alianza. Ver a un fanático en una guerra de guerrillas contra el Imperio en medio de población civil. Mandar asesinar a gente por la posibilidad de que les perjudique en el futuro.

Es uno de los pocos aspectos que dan personalidad a la película y que nos dejan bien claro que estamos en una guerra que no se puede ganar sin enterrar las manos en el barro y que se tiene que ser fuerte en todo momento, no solo cuándo conviene. Ver a la mayoría de la Rebelión rechazar Jyn y su plan y querer huir del Imperio y esconderse es un bofetón, es tirarte a la cara que aunque sus causas son justas no implica que ellos lo sean.

Esta película tiene muchas de estas perlas desperdigadas por el metraje. El propio padre de Jyn es un científico imperial que lleva quince años trabajando en la Estrella de la Muerte solo para asegurarse de dejar un punto débil en ella para que pueda ser destruida. Se resigna a trabajar para los hombres que asesinaron a su mujer y le alejaron de su hija para poder dar una oportunidad a la rebelión.

Otro aspecto importante. Los personajes. Son funcionales, si. Pero más importante, te importan. K-2SO se gana tu corazón en la primera escena, Jyn Erso, Chirrut, Baze, hasta Cassian y Guerrera, todos se ganan un espacio en tu mente y te importan, los quieres ver triunfar, quieres conocerlos, estar con ellos y sufres con sus muertes. Puede que no puedan lucirse mucho o que sean simples, pero si consiguen que te duela su muerte es que están bien escritos y actuados.

Aquí una mención especial para los genios detrás de los trailers, la mayoría de personajes tienen personalidades distintas a las que podías imaginar viendo los avances.

En cuánto a la acción, estamos en una guerra. Todo es sucio, visceral, las caídas duelen, los desembarcos retumban, los AT-AT se sienten en el suelo como gigantes. Todo lo que ves rezuma realismo en el sentido de que te sientes tirado en la arena con la rebelión, esquivando los disparos y resistiendo a duras penas.

La película logra que cada batalla resulte emocionante, distinta e inmersiva. Te atrapa y no te suelta hasta que hayas ganado una medalla.

Enlazando con esto y para terminar, buena parte de la culpa la tiene la fotografía. Es preciosa. Tiene planos (El de Vader o la Estrella de la Muerte creando un eclipse) que son para enmarcarlos en la pared. Sé que esta película tiene una parte realizada por otro director pero me juego las uñas del píe a que las imágenes más impresionantes a nivel visual son de Gareth Edwards.

Como director tiene muchas fallas pero a nivel visual crea imágenes increíbles, solo tenemos que irnos a Godzilla para confirmarlo.

Rogue One se ha convertido en mi segunda película de Star Wars favorita por detrás de El Imperio Contraataca.

¿Hace falta decir más?