Volvemos con los zombis. Aunque esta saga se ha olvidado de ellos para dar paso a las mutaciones aberrantes que pululan por su universo. Admitamos que un monstruo con un cerebro en vez de cara es más llamativo que un viejo con los ojos inyectados en sangre.

¿Qué nos encontramos en esta película? Un apartado visual impresionante, y que parece haber hecho por partes y luego cosido. Los personajes pecan mucho de unos movimientos carentes de peso o ligereza, son marionetas sin más, pero este problema lo acarrean los japoneses desde hace años, no se les da bien animar en digital a los humanos.

En el lado opuesto esta el escenario y los efectos que rozan la perfección, con humo, fuego, sombras e iluminación tratadas con mimo y haciendo que muchos planos nos engañen y pensemos que esa ciudad es real. Esto tiene su punto positivo, es increíble a un nivel visual, dejándote embelesado, pero por el otro deja al descubierto las fallas en los personajes. Por suerte las peleas son contundentes y ahí si que se nota el peso de los personajes y de sus golpes.

Las peleas cuerpo a cuerpo de Ada Wong y Leon son impresionantes por coreografía y montaje y son de los mejores momentos que tienen los personajes. Hablo desde un punto de vista técnico.

A nivel de argumento, el guionista sigue la máxima Warner y decide que una historia A-B es aburrida y mete de por medio todo el alfabeto cantones. ¿El resultado? No tengo claro que pretendía la mitad de los personajes. En parte lo entiendo, esto es un puente a un juego que resolverá mucha de las cuestiones (El contratista de Wong), pero en otros me resulta un hilo colgado por culpa de un guionista ambicioso.

La historia va de un país que nació tras la caída del muro y esta en plena guerra civil dónde los rebeldes han empezado a usar armas biológicas ante la crueldad del gobierno. Hasta ahí me queda más o menos claro, pero luego no sé que quiere la presidenta, no sé de dónde han sacado cuatro pelagatos armamento biológico y mucho menos como justifican arrasar un país entero con un ejercito zombi por el bien de la independencia. Esa es otra, ¿Qué independencia? El país es independiente ¿Quieren que el país se divida en dos? ¿Por qué no lo explican? Hablan de libertad e independencia como si fuera lo que tuvieran que decir y ya esta, no hay un motivo para ello porque me han explicado el contexto en un minuto y luego se han olvidado.

Lo dicho, el guionista complica a sabiendas una trama sencilla y luego no arregla el desaguisado. Una lástima, porque una historia con menos pretensiones habría brillado más.

Aun con todo, no penséis que la película me parece mala. Tiene los tropos de este universo y tragó con ellos. Es mucho mejor película que lo que será nunca el desastre en que se ha convertido la saga Resident Evil en cines. Tiene unos personajes que derrochan carisma en Ada Wong y Leon. Ada es Catwoman, ya con eso me tiene conquistado, y Leon es una persona con una determinación y un valor que le seguirías al fin del mundo. Ninguno se pisa, no hay estrellas a las que hacer brillar insultando al resto. Aquí todos tienen sus momentos de gloria, Ada sale ganando en este aspecto, y es un no parar. La película tiene más acción (Y mejor hecha) en noventa minutos que las tres últimas de la Jovovich.

Le doy entre un seis y un siete. Un digno entretenimiento que de seguro hace las delicias de los seguidores de la saga de juegos. La pongo un peldaño por debajo de Degeneración de momento, voy a revisitarla y ya veremos en su reseña si ha aguantado el tiempo y sigue pareciéndome mejor que esta entrega.