Aloy creció en un mundo que la trató como una paria. Un mundo donde las maquinas y la naturaleza se abrazan en una singular relación sobre las ruinas de un mundo muerto y maldito.

No soy amigo de los juegos de mundo abierto, me atacan los nervios y terminan por desesperarme. Me gusta seguir la historia, conocer a la protagonista y el mundo abierto suele tener el inconveniente de desviar la atención a tramas que, muchas veces, son absurdas en el contexto. Estoy salvando la galaxia de los Segadores así que voy a pararme en todas las tiendas para pedirles un descuento si les hago publicidad. Por suerte, aunque Horizon tiene ese complejo de mundo repleto de misiones no te atosigan, si quieres ayudarles puedes, si quieres seguir con tu historia puedes. No te agobian en ningún momento.

Otro punto positivo es que las tramas secundarias que he jugado son importantes, no se trata de buscar un jabalí perdido o conseguir cristales Apexis para un mago vago. Aloy se encuentra con misiones como encontrar a la cacique de su pueblo o a la líder de un grupo de guerreros, personas con una importancia vital para el mundo de Aloy. Eso me gustó, no sientes que sean trozos pegados para alargar la historia, son parte de una historia más grande que la protagonista que te deja vislumbrar que el mundo vive más allá de tu control.

No hablaremos de dificultad aquí, lo he jugado en modo historia porque era lo que me interesaba, pero tiene una curva de dificultad bastante bien ajustada por lo que he podido comprobar. Llegados al final notas que los enemigos han crecido contigo, detalle que encaja tanto con la mecánica propia de un juego como con la propia historia del mismo.

Si que tengo un detalle que a mi me dificulto jugar y es que a cierta distancia no veo a la gente. He preguntado y nadie tenía ese problema así que deduzco que tuve la gran suerte que mi daltonismo hiciera desaparecer a los enemigos contra el fondo. Otro detalle es que Aloy te va anunciando los acontecimientos en lugar de diseñar el escenario para que lo veas. Me explico, en cierto momento vemos una maquina inmensa y majestuosa, pero Aloy nos avisa de ella antes de que podamos llegar a verla. Creo que si hubieran diseñado un poco mejor esa escena podría haber aparecido delante nuestra porque más de una vez me he encontrado mirando en todas las direcciones por un comentario de Aloy y he descubierto que el personaje estaba viendo algo detrás de una pared porque ha saltado el script.

Como veis los problemas que le he sacado al juego son insignificantes, y es que Guerrilla nos ha presentado un juego impresionante con un nivel de producción que puede llegar a dejarte mudo en según que momentos. Aloy es perfecta, al igual que el resto de personajes. Todos transmiten una naturalidad apabullante, sus gestos, sus miradas, sus rostros, todo esta tratado con la máxima perfección para que su mensaje no se pierda. Hay escenas mudas en que todo se transmite con los ojos y te llega a impactar en lo más hondo. Muy pocas producciones pueden hacer eso, y que ahora me vengan a la cabeza solo Half Life 2 con Alyx Vance y The Last of Us.

Uno de los puntos más controvertidos para los borregos de internet y que es digno de aplaudir a Guerrilla por el valor de enfrentarse a toda esa masa, es la integración tan bien ejecutada en Horizon. Tenemos una protagonista femenina que se aleja del canon, no es Lara Croft, es una chica que podrías encontrarte en cualquier lado. Es fuerte, lista, compasiva, independiente, con esperanza pese a todo, pero vulnerable. No es una simple skin a un personaje masculino plano, Aloy vive. El resto de personajes les pasa lo mismo, son todos humanos, incluso comprendes a los villanos de la función, a todos. No los justifica pero se toma la molestia de mostrarte su punto de vista y porque han llegado al punto en el que se encuentran en el juego.

Es una gozada pasearse por un mundo que no se escuda en: Medievo=Machista y nos muestra un mundo con diferentes sociedades, cada una funcionando de determinado modo. La sociedad en la que crece Aloy es matriarcal y se basa en las tradiciones y la veneración a la diosa naturaleza; en Meridian se rendía culto al Sol con ritos de sangre; y así podríamos seguir, pero ninguno pone a la mujer por debajo (salvo los Carja por lo que me han comentado por pinganillo). La mayoría de líderes, por no decir todas las que se ven son mujeres. Aunque yo no he llegado a verlo de manera explicita se deja de una forma clara que no hay discriminación por tu orientación sexual, a Aloy le tiran los tejos todo el mundo y el lenguaje del juego no se posiciona contra uno, los muestra porque es algo habitual y normal.

Horizon Zero Dawn es un espejo en el que deberían mirarse futuras producciones de este calibre, este es el mínimo que deberían tener a partir de ahora. No me refiero a nivel técnico, me refiero a nivel de normalización, esto debe ser lo mínimo exigible.  No podemos seguir anclados a una sociedad opresiva solo porque cuatro gandules digan no sentirse identificados con una pelirroja. Nadie se queja porque no se siente identificado con un erizo azul que corre a la velocidad del sonido, ni por ser un tío que se estrella en medio del atlántico y acaba en una ciudad submarina.

La conclusión, antes de irme por las ramas y comience a pegar a tontos, es sencilla. Compre este juego porque tiene dinosaurios gigantes de metal, y ya podéis ver que no es algo que haya comentado demasiado en esta entrada y no porque sea algo malo (Al contrario son impresionantes y son preciosos a nivel de diseño); es porque todo lo demás que ofrece lo eclipsa. Es un juego imprescindible si tienes una PS4.